martes, 24 de noviembre de 2009

Todo se andara...

Os hago entrar en materia. Estábamos una serie de amigos en un bar de mi barrio, “cerveceando” y viendo el fútbol. Al lado nuestra estaban sentadas dos chicas normalitas tirando para feas, en una de éstas un colega me dice. –Migue, esa tía de ahí no deja de mirarte- Yo que, la verdad no me había fijado en ella anteriormente, hago un escorzo con disimulo y la miro de arriba abajo me doy cuenta que la chavala no es gran cosa, aunque tampoco era un adefesio, y le respondo. –Peri pues que me mire si le gusto, porque la verdad es que no me parece nada del otro mundo.- La conversación varió y más tarde se repitió la insistencia de mi amigo aunque con la misma respuesta por mi parte.
Todo esto me ha llevado a reflexionar sobre mi soltería. La verdad es que yo nunca he sido una persona de las que denominamos lanzada, vamos que hasta que no tengo a la mujer delante de mi cara no me arranco, y aun así me lo pienso. Esto es fruto de años de inseguridades respecto a las mujeres, que con mi anterior relación quedaron enmascarados. Ahora me tengo que enfrentar a esa cruda realidad otra vez: el ligar. ¡Uf! Es que me da pereza hasta de pensarlo.
Yo no soy el típico elemento que sale con los amigos a conocer tías en las discotecas, la verdad es que lo que a mi me apetece cuando salgo con los amigos es hablar con ellos, discutir de lo divino y de lo humano, fútbol política, religión, lo que sea, y sobre todo pasar un buen rato con gente a la que ves como máximo una vez por semana. No es que no tenga necesidad de estar con mujeres (creedme la tengo y mucha), pero no voy a buscar esa situación de ligar en cualquier sitio. Lo siento yo soy así, que le voy a hacer. Soy más de conocer a alguien por cualquier otra circunstancia y si nos gustamos bien y si no, pues también. Pero tiene que se algo más casual.
Ahora bien ¿me habré cerrado al sexo femenino? La verdad es que no, pero es que no me apetece estar con nadie por estar. Hoy por hoy lo que me llama la atención es divertirme sin ningún compromiso con nadie, salir sin dar explicaciones y si conozco a alguien pues bien, pero no lo voy buscando. También creo que el haber tenido una relación tan buena y durante tanto tiempo me ha malacostumbrado o acomodado, porque con tu pareja no necesitas hacer un esfuerzo para conocerla, ya lo sabes todo de ella, sus virtudes y sus defectos y te limitas a disfrutar de la relación mientras vaya bien, cuando va mal eso es otra historia. Además cuando uno esta acostumbrado a comer todos los días jamón de Jabugo que te pongan para comer hamburguesa… Es difícil hacerte a la idea de que tendrás que almorzar alguna que otra vez comida basura para poder encontrar otra vez un jamón de buenas condiciones (esto es un símil que nadie se moleste)
Aún así ese jamón se acabo, sólo nos queda relamernos, no olvidarnos el gusto que nos dejó e irnos a comer otra vez… porque la vida es un gran banquete y algún que otro jamón habrá por ahí para mí digo yo, ¿no?

Como en mis últimos escritos hay os dejo un “temazo” que me encanta. Gracias Isaías por descubrirme a este tío

2 comentarios:

Isaias dijo...

Muy bonito tio, haces que me siento identificado...

Si te gusta ese tema escucha estas

http://www.youtube.com/watch?v=RN4lESHxMZQ

o esta

http://www.youtube.com/watch?v=EK1db1Z8uic

muy tristes pero dicen mucho, eso es lo importante de las canciones no?

Miguel Sarmiento Pelegrina dijo...

Putada que tenga el sonido del portatil estropeado.
Las canciones siempre tienen algún mensaje, sobre todo, las buenas y ahora se los pillas con una facilidad increible.
Me alegro de que te guste el post, es como un resumen de lo que pensamos los dos